En las tres trincheras

Este largo puente de San Jose ha sido fecundo en actividad porque hemos aprovechado la posibilidad de acceder a otros municipios y, conformando pequeños grupos, hemos explorado tanto en Galdames como en Ubal y Jorrios.

Se trata de ir recuperando la forma física en unos casos o de ponerse a tono con la técnica en otros.

En Galdames, el día 19, el equipo nuevo va a Urallaga a explorar una escalada que quedó pendiente hace años en la zona oeste del sector Balmaseda. Se trata de revisar un aporte que justo hoy traía bastante agua. Se comienza el ascenso por una colada arcillosa, buscando luego la progresión por roca de mejor calidad. Queda incabada, pero la parte mas vertical de la escalada ya ha sido superada. Revisamos también la gatera que se desarrolla en direcciones norte.

En paralelo, otro equipo ha realizado en ésta y otras jornadas anteriores, el acondicionamiento del acceso y exploración de una grieta al fondo de «La Escarpada»


En Ubal, el día 18, se hacen dos entradas, una en la «Mina Clara» y otra en una torca nueva cerca del «Pumarejo». En mina Clara, se equipa un pasamanos para llegar a punta y se avanza un poco por una gatera de barro. La torca nueva, que se desciende entre maleza, se colmata a poca profundidad.

Los dias 19, 20 y 21, con los compañeros del GEMA, realizamos una actividad prolongada en la Torca de la Achadera, que incluye, dos noches de vivac. No tenemos equipo de topo, así que nos centraremos en avanzar.

Entramos el viernes sobre las 12:00 con lluvia y tras descender la «cueva-barranco», llegamos a las galerías fósiles totalmente empapados. Pasamos por el vivac a dejar la comida y la ropa, y cogemos el material de exploración necesario. Vamos al fondo de la galería «Alita de mosca», donde en su día perdimos el aire. Tras reequipar un pozo de unos 80m , revisamos la sala que hay en su base. Hay varios aportes y perdidas, quedando pendientes dos puntos que habría que forzar un día sin agua.

De vuelta, en altura, vemos una diaclasa que remontamos unos 30 m, hasta un punto donde quedan, una escalada y un pozo que descender. Emprendemos la vuelta al vivac sobre las 20:30, y llegamos a él a las 22:00. En el P80, quedan varias ventanas que revisar. Esta zona va a dar trabajo.

El sábado nos ponemos en marcha hacia las 12:00. Como estamos cansados, instauramos el «Alper-eguna» y descendemos un pozo que teníamos reservado junto al vivac. Baja unos 70 m y al subir revisamos una ventana ascendente (Saguzahar Albinoa) hasta que se termina la batería. Se deja equipado para realizar la topo. Luego, nos vamos a revisar la galería principal entre la sala Alluitz y el vivac donde hemos encontrado una galería pequeña y sin aire pero tapizada de excéntricas. Precioso, pero sin más resultados. A las 21:00 estamos de nuevo en el vivac.

El domingo «amanece» a las 9:30, desayunamos fuerte y a las 12:00 arrancamos hacia la superficie. La cueva ya se ha drenado del todo y subimos entre los típicos goteos, pero nada que ver con el diluvio del viernes. El ultimo sale a las 15:45.


En Jorrios, el día 20, con bastante frío, otros cuatro socios organizamos una jornada de prospección. Se trata de reconocer los accesos a la zona del «Toral», donde hay algunas simas antiguas catalogadas por el GEV y el Esparta. Una buena excusa para localizarlas y ver si se les pasó algo por alto.

Localizamos las que parecen ser la J-110 y la J-121. Se encuentran en una zona de media ladera con lapiaz y dolinas arboladas. La zona es bonita e interesante y está más que justificada la convocatoria de una jornada de prospección más en profundidad.


Para acabar el fin de semana, el día 21, en Galdames, los «yogurines» se internan en Arenaza 3 para trabajar las técnicas de progresión e instalación. Hoy hay bastante agua en la zona arcillosa del tramo de galería horizontal inicial.

Descendemos hasta el rio Aranaga por el p50. El nivel del río se presenta bajo, pero la prediccion de lluvia en el exterior nos hace ser cautelosos y volvernos hacia atras al comienzo del caos de bloques de «Nueva Arenaza».

La zona es algo precaria, con mucha roca suelta. Nos sorprende algún «meteorito» que otro.