La Achadera: «Pancetamol» y «Binuprofeno»

El viernes por la tarde entramos 5 Burnitxus en la Torca de la Achadera. En unas cuatro horas y media nos plantamos en el vivac. Cenamos y al saco; eso si, acunados por el «aroma de boletus» que desprende la que hoy es nuestra casita.

El sábado por la mañana nos levantamos a las diez. Desayunamos a base de cafeína y «pancetamol», y para la una estamos ya en las zonas de trabajo. Nos hemos organizado en dos equipos, el primero, con dos espeleos, para quitar escaladas, el segundo, de tres espeleos, para forzar un estrecho y con la esperanza de hacer bien de topo en la punta.

El equipo de escaladas, primero ataca una E15 con buena roca en la pared derecha, que lleva hacia una grieta en una amplia cornisa. La grieta cierra por bloques, así que hace la topo y se desinstala. Después de un picoteo, se ataca una segunda escalada en la pared izda. Se trata de llegar mediante una E11, a un bonito meandro entre dos chimeneas «infinitas». Tenemos la esperanza de subir desde aquí, a un primer escalón que abra la puerta del nivel superior que creemos intuir. Una vez arriba, el meandro se estrecha y no tiene aire. Para aprovechar lo subido y poder seguir escalando en ésta zona en el futuro, se deja instalado en fijo. Luego la misma rutina que antes: se hace la topo y se desinstala la escalada.

El segundo equipo se dirige al tajo en la punta. La continuación se presenta estrecha, pero el aire en la cara nos anima y refresca, entre macetazos, piquetazos y movimientos de escombro.

En un par de relevos abrimos lo suficiente como para que pase el mas fino. Desde el otro lado, ayuda en la tarea y pronto el resto conseguimos pasar.

Una vez pasada la estrechez, se abre un galería de unos 15 m de anchura con la misma orientación que la galería por la que hemos llegado. La bautizamos como «Azeri galeria» en honor a su descubridor.

Avanzamos unos 100m rodeados por cantidad de formaciones y espectaculares excéntricas. Hay quien incluso dice que esto «¡es mas guapo que la Sala Blanca de la Txomin!». Seguimos por lo mas evidente hasta un punto donde la galería tiene un resalte importante, insuperable sin cuerda. por delante,se ven unos 50m de galería, y da la sensación de seguir también por debajo de nuestros pies.

La galería tiene unos 10m de ancho y el aire aún se nota en nuestras caras sudorosas; la emoción reina… Volvemos explorando ramales y valorando incógnitas. Pasamos el estrecho de nuevo, comemos, y con las pilas cargadas nos repartimos tareas: dos vamos a topografiar y el otro queda ampliando el paso. Hacemos 220m de topo y marcamos las incógnitas, aunque damos por supuesto que habrá que remirar todo bien a fondo la próxima jornada.

A las 7 aprox. emprendemos el camino de vuelta, vemos el trabajo hecho por el equipo de escaladas y nos juntamos con ellos en Laubideta donde se han desorientado y andan «reexplorando» la zona. Volvemos todos juntos al vivac, a por la cena y el poco «Binuprofeno» que pudimos meter debido al sobrepeso de los petates. Gran día de espeleo, nos llevamos la gratificación de una continuación evidente y prometedora.

El domingo nos levantamos a las diez. Otro desayuno a base de «pancetamol» y para las doce estamos en marcha hacia la calle. Esta vez serán 7 horas de deshidratación, aparatos que resbalan, rampas incómodas, esperas para evitar la caída de piedras… en fin: espeleología. Llegamos a la calle, cansados y contentos.

Fragua; por los filones de la Mina Amistad

Esta última temporada, nos hemos decidido a revisar los filones altos que cruzan por el techo de la Fragua. Corresponden a lo que en los planos mineros denominan «Mina Amistad»

Hemos llegado a localizar tres niveles superiores de bastante longitud con abundantes restos mineros abandonados y… espectaculares desfondes dejados al extraer el mineral que ocupaba ese espacio, antes relleno de mineral pero vacío ahora.

Hoy realizamos una última escalada y pasamanos para acceder a las galerías superiores. Como no encontramos galerías naturales, procedemos a desinstalar todo.

Travesía Cobijon – Sel del Haya

Invitados por unos amigos de Madrid, seis miembros de Burnia nos vamos a realizar una travesía en el complejo de Udias. En concreto la travesía Cobijón-Sel del Haya. A parte de la travesía propiamente dicha, hacemos el recorrido completo hasta la sala de Gours de la cueva del Rescaño.

Entramos por la Boca de Cobijón enfrentándonos enseguida al Pasamanos de la Muerte (la verdad que el estado de algún maillon y de alguna cuerda daban miedo), que tras una ardua pelea desemboca en los grandes volúmenes de la cavidad del Rescaño.

Tras recorrer enormes galerías, salvando siempre el río (utilizando para ello alguna gaterilla peleona) llegamos a la Galería Avatar, a la que se accede por una cuerda ascendente en una instalación bastante mal hecha y por consiguiente peleona. Desde esta misma instalación y bajando un pozo de 20 metros llegamos a la Gran rampa.

Continuamos por las galerías hasta llegar a una tirolina que nos deja en el otro lado del río. Pasamos por el Balcón del Cañón de Udías y llegamos a la unión con la mina Sel del Haya. No obstante seguimos adelante por las galerías de Rescaño hasta el final.

A la vuelta en este punto subimos la galería y pasamos ya a Galerías mineras, que tras un tiempo nos llevan de vuelta a la calle. Hemos empleado aproximadamente unas 11 horas.

«La Fragua»

Este fin de semana, las lluvias no han dado mucha tregua como para realizar las normales actividades de exploración, por lo que un nutrido grupo de 10 espeleos hemos visitado el soplado de Arañaga en Galdames.

Hacemos dos equipos. Mientras tres espeleos bajan a Pequeño Carlista con la intención de formar en verticales a uno de los miembros del grupo, el resto vamos hacia el rio, más allá de la rampa de 40m. Llegamos hasta el pasamanos por encima de la cascada, y tras bajar unos metros vemos que la corriente va muy fuerte, así que decidimos dejarlo ahí.

A la vuelta nos encontramos con el equipo que ha estado en Pequeño Carlista y que han dejado instalado el volado por si nos apetecía bajar. El resto bajamos la sima y la desinstalamos. Salimos ya de noche y sigue lloviendo.

Rio Aranaga
Galería pricipal

T-269

Este fin de semana hemos subido un equipo de cuatro personas a La Cabañuela, para acabar el trabajo en la T269 que quedo pendiente a primeros de mes. Mientras una persona prospecta las dolinas cercanas, otros tres bajamos haciendo unas fotos de la sima. A la subida hacemos la topografía y desinstalamos la cavidad. Al final se trata de una bonita sima de unos 70m de profundidad, que acaba en un tapón de bloques pequeños y sedimentos.

Puedes ver la ficha de la cavidad en: Fichas

Intento de conexión entre T136 y T092

Este fin de semana nos desplazamos seis espeleos a Trucios con la intención de explorar las posibilidades de conexión entre ambas cavidades. Según la topo «solo» habría unos 70m entre las puntas de exploración y el interés esta en ver si alguna incognita de la 92 nos da paso al fondo de la 136… y «más alla»…

Tres espeleos equipan la T092 y llegan a la hora acordada a la gran sala. Llevamos un ARVA en modo rastreo que «oye» los pitidos del emisor en la T136, pero que al no indicar la distancia de forma digital, nos confirma que la distancia debe ser mayor de 40m. Los talkies no dan conexión, el ruido que generamos no es oido por el otro grupo, y las corrientes de aire en cada cueva, no parecen compatibles.

En la T136, otros tres espeleos van al meandro desfondado de punta por un largo, estecho y húmedo camino… donde desplegamos nuestros «jugetitos eléctronicos» sin resultado.

Ya que estamos allí, forzamos un paso en punta hasta llegar por dos caminos paralelos al cauce activo… solo para ver como se pierde el agua y el aire por un estrecho meandro, casi impenetrable, que queda para el futuro.

Hoy toca: hacer la topo del meandro explorado y de salida, recoger cuerdas y retirar algo de material que ya está algo deteriorado. Cansaditos y con el rabo entre las piernas, nos juntamos con el equipo de la 92 que ya esta en el exterior, con el que compartimos la información y una piperrada de campeonato.

De momento las dos cavidades siguen siendo independientes. Habrá que cicatrizar la experiencia y esperar a otro periodo de sequía para volver a intentarlo de nuevo.

Orpogain Leizea- Udalaitz

Quedamos dos socios de Burnia con dos socios del GEMA para recuperar material en la sima de Orpogain. Nos dirigimos hasta el Udalaitz temprano, con buen tiempo, hasta llegar a la boca de la cavidad. En la entrada nos espera un delicado P80 (por la caida de piedras), y una vez en la base, una galería horizontal con varios tapones gigantes de coladas que hay que sortear mediante escaladas y rapeles, cuando no por pasos estrechos, o vadeando gours «bien llenitos»

A pesar de las lluvias de la semana pasada, la cavidad esta bastante seca, pero en una badina del camino que debería estar seca, hoy nos entra la risa. Tenemos que franquearla metiendo el pecho en el agua. (Uff, pingüino-muerte). Una vez en punta, un equipo va a topografiar una lateral con excentricas, otro sube a recuperar el material de tres escaladas y mientras, hacemos un reportaje de estas galerías. Con el material recuperado, pasamos otra vez el paso bajo con agua y vamos tirando para la calle tras 8 horas de húmeda actividad.

T-269, una sima «guapa», otro chasco

Con la excusa de la busqueda de Torca Labrada, nos acercamos a la zona de Las Cabañuelas. Vamos 5 personas hasta la sima que «Rosendo» nos indicó que «se trataba de la verdadera Torca Labrada». No lo es.

Se trata de una sima bastante peligrosa por estar en la linde del camino, oculta por la vegetación.

Comenzamos el descenso podando las zarzas de la entrada y anclando en una encina de la boca. Descendemos por un tubo vertical de unos 6m de diámetro. En los primeros 10m conecta con un pozo paralelo que baja desde el exterior. Tocamos fondo despues de unos 7 fraccionamientos. Profundidad estimada de unos 70m.